Como presidente electo de CESM, Andrés Cánovas ha expresado a DIARIO MÉDICO (DM) su “absoluto respaldo y solidaridad” con las huelgas de Galicia, Canarias y Cataluña (en las tres, CESM aparece entre los sindicatos convocantes), “sobre todo esta última, porque la mala gestión del actual Gobierno está llevando a la sanidad catalana a un callejón sin salida”.
Aun así, también aprovecha para denunciar “la política unilateral de recortes de Galicia y Canarias, donde se toman decisiones fundamentales sin ni siquiera sentarse a negociar”, y aprovecha para mostrar su convencimiento de que “el seguimiento de los paros será mayoritario entre los médicos, porque llevamos muchos años entre cabreados y asustados: lo primero, por los más que evidentes recortes, y lo segundo, a la espera de que no nos afecten tanto como al de enfrente”. Esa dualidad de sensaciones que Cánovas atribuye al médico español hace que, según él, sea “más que probable” que las movilizaciones se extiendan a otras comunidades después de las elecciones generales. (…)
El presidente nacional de CESM también quiere llamar la atención sobre el hecho de que los paros ya convocados son “de baja intensidad, es decir, de corta duración, para afectar lo menos posible al paciente sin dejar de renunciar al derecho a expresar nuestro malestar”.
Paros preelectorales
Según resume DM en una información adicional, la generalizada política de contención presupuestaria que las regiones han puesto en marcha para cuadrar sus maltrechas arcas ha desembocado en convocatorias simultáneas de huelgas en varios servicios de salud. Los paros anunciados los últimos días en Canarias (Cemsatse, UGT y CCOO, que integran el grueso de la mesa sectorial), Galicia (la coalición CESM-Omega) y Cataluña (Médicos de Cataluña) tienen dos denominadores comunes: las centrales convocantes exigen a sus respectivas consejerías una salida alternativa a los recortes, y los paros se han programado antes de la cita con las urnas del 20 de noviembre. A las huelgas preelectorales se suman las concentraciones convocadas en Valencia “en defensa de los servicios públicos” la semana inmediatamente posterior a las elecciones (del 21 al 25 de noviembre).