El TSJ ratifica la condena de prisión por apuñalar a un médico con unas tijeras quirúrgicas

Según una nota de prensa emitida hoy por el COMIB, El Tribunal Superior de Justicia de Baleares ha ratificado la condena de 8 años y seis meses de prisión de la Audiencia Provincial de Palma a un hombre como autor de un delito de asesinato en grado de tentativa, por apuñalar a un médico con unas tijeras quirúrgicas en un centro de salud y a la indemnización de 8.000 euros por los daños morales padecidos.

Los hechos sucedieron en febrero de 2023, cuando el acusado llegó a un centro médico derivado desde una clínica privada, porque había sufrido un accidente de tráfico y presentaba lesiones en una pierna.

Después de que los profesionales sanitarios le atendieran y le explicaran el tratamiento que debía seguir, le hicieron pasar a la sala de curas. El médico salió un momento y al volver observó que en la mesilla contigua a la camilla había un teléfono móvil que estaba grabando en vídeo.

El facultativo le señaló al paciente que no podía grabar allí sin su permiso y trató de coger el aparato. El acusado reaccionó de forma agresiva. Se lanzó contra el médico y empezó a golpearle con un objeto metálico. La víctima descubrió, al intentar zafarse de él, que llevaba en la mano unas tijeras quirúrgicas y que se las intentó clavar en el pecho y la espalda, pero no lo consiguió porque tenía puesta una protección de seguridad.

Sin embargo, la sentencia recogía que “si un resultado más grave no se produjo fue por circunstancias ajenas a su voluntad, pues, aunque el instrumento era idóneo para quitar la vida de una persona, el sistema de protección con el que contaban las tijeras y las circunstancias que se presentaron en la agresión determinaron que no se consiguiera la finalidad pretendida”.

Asimismo, incidió en “un claro ánimo de querer causar la muerte de la otra persona, a la vez que supone una acción sorpresiva, caracterizada por un ataque súbito, inesperado, repentino e imprevisto, aprovechándose que la víctima se encontraba en la camilla y de espaldas a su agresor”.

Según el artículo 550 del Código Penal español, agredir a un médico de la sanidad pública cuando está trabajando se considera un delito de atentado contra la autoridad. De este modo, el TSJ ha desestimado el recurso de apelación de la defensa del agresor y confirma los pronunciamientos de la sentencia apelada.

Desde el Sindicato Médico de Balears (SIMEBAL-CESM) celebramos todas las sentencias que protegen y defienden a nuestros facultativos en el ámbito laboral.

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